El proceso de lixiviación de minerales cumple un papel preponderante en la recuperación de los valores metálicos contenidos en los minerales que se procesan en una planta. La extracción de los metales preciosos es mediante el uso de cianuro de sodio, pero este reactivo químico en solución y en presencia de minerales sulfurados de cobre, hierro, zinc, etc. forman complejos cianurados como los tiocianatos, hexacianoferratos, cianocupratos, etc., que se encuentran en cantidades variables en la solución pasivando la disolución del oro creando así un problema en la extracción como también en el tratamiento del efluente que sale de la planta. La química del proceso de disolución está bien definida, pero se subestima su impacto sobre las características de las fuentes de agua residual y los costos de tratamiento del efluente. La industria minera conoce las consecuencias de la mal...