Es practicamente imposible hablar de conducir un coche sin un espejo retrovisor. Es una herramienta escencial a través de la cual miramos atrás para no estrellarnos adelante. No solo nos permite mirar lo que dejamos, sino sentir la totalidad del movimiento. El movimiento como un circulo integral y la vida como una línea que sin darnos cuenta se va convirtiendoen un circulo externo. Ese espejo nos permite sentir el recuerdo como parte de nuestro presente y mirar los hechos, los estudios los consejos y sobretodo los nombres que van moldeando una dirección a seguir o una desición a tomar.