Los cambios vertiginosos en el mundo, vienen impactando la naturaleza del Estado en su estructura organizativa, las municipalidades como entidades públicas extienden el Estado hacia el ciudadano. Al amparo de su autonomía política, económica y administrativa, deben cumplir con los fines que las normas le asignan, como son: adecuada prestación de los servicios públicos locales y el desarrollo integral, sostenible y armónico de su circunscripción. Sin embargo, presentan diversos problemas que afectan la eficacia y eficiencia de los servicios públicos que reciben los ciudadanos, limitando por consiguiente su desarrollo humano. Contar con una adecuada gestión administrativa, alineada a las políticas de un estado moderno que sea abierto, electrónico e inter institucional, es fundamental para impulsar cambios significativos que aseguren una implementación progresiva de bienes y se...